Atravesado por el río con el mismo nombre en la zona central de Trasmiera se encuentra ubicado el municipio de Miera. De su patrimonio destaca la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, en la Cárcoba, el hotel París en Mirones, y las cabañas ganaderas de tipología pasiega que salpican las praderas. Desde el punto de vista histórico, las primeras pruebas de presencia humana en el municipio datas del cuaternario, prueba de ello son las cuevas prehistóricas de “Rascaño” en Mirones, “Piélagos” en Montesante y las “Del Salitre” en el barrio de Ajanedo. Las actividad económica de la zona se basa, como en casi toda Cantabria, en la ganadería, donde predomina el ganado vacuno de raza holandesa. La ganadería se complementa en la zona alta del valle con la explotación forestal y en las tierras más bajas con la agricultura, dedicada a las alubias, maíz y las patatas.